Cookies con trocitos de galleta Oreo





Las cookies son unas galletas típicas norteamericanas. Son redondas, irregulares, y se pueden hacer en distintos tamaños, desde minis hasta muy grandes. A mi me gusta hacerlas bastante grandes. Se pueden hacer en distintos sabores y echarles casí de todo, incluso trocitos de otras galletas, como en las de aquí. Esto, según un amigo, es meta-repostería, porque hacemos galletas con trocitos de galletas. Las que tienen trocitos de chocolate son muy buenas. También las de chocolate blanco y nueces.


Ingredientes:
Una taza de azúcar
Una taza de azúcar moreno
Una taza* de mantequilla o margarina (blandita, de fuera de la nevera)
2 huevos
3 tazas de harina normal
1 cucharadita de sal
1 cucharadita de levadura Royal
1 cucharadita de vainilla (si tienes, no pasa nada aunque no se la pongas)
30 mitades de galleta Oreo (la parte de chocolate de 15 galletas)
*La taza es la medida que usan los norteamericanos en sus recetas. Es una taza de cuarto litro, vamos un vaso de agua de los nuestros. Yo, la mantequilla no la mido en taza, porque es un pringue. Pongo una pastilla de 250 g (aunque es un poco menos).

Enciendo el honor a 190º.

En un bol pongo los azucares, la mantequilla, los huevos y la vainilla. Lo mezclo bien, batiendo (pero a mano o con batidora de aspas, no con Minipimer) suave.




En otro bol pongo la harina, la sal y la levadura y lo voy incorporando poco a poco a la mezcla anterior.




Cuando está todo bien mezclado (homogéneo), le incorporo las galletas en trocitos. Yo, para hacerlas trocitos, las meto en una bolsa de plástico y les doy unos golpecitos con el rodillo.




Las galletas las incorporo con la espátula. No vuelvo a ponerlas en la batidora, porque quiero encontrar tropezones de Oreo en las cookies.



En una fuente de horno cubierta con papel de hornear (esta vez use Albal, pero el de Lidl es el que uso normalmente), pongo bolitas aplastadas de masa, bien separadas unas de otras porque después se desparraman. Lo meto unos 10 o 12 minutos. Para esta cantidad yo tuve que hornear tres bandejas. Como aquí solo tengo una, hago una después de la otra.




Son muy fáciles y siempre salen bien. No las dejes que se quemen, aunque te parezca que están blandas al enfriar endurecen.




Nada más sacarlas, hay que ponerlas en una superficie lisa a enfriar. Si cogen alguna forma rara, se quedan después con ella.




Una vez frías, podemos meterlas en cajitas y guardar o regalar.



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