Crema de champiñones (Receta fácil de dieta)






Llevo un año malísimo y, cuando por fin parecía que otra vez podía cocinar tranquilamente, algo sucedió y otra vez tuve que dejar aparcados mis fogones. Hace dos semanas, el mismo día que preparé el brécol asado al curry, hice una rica crema de champiñones.  

Lo bueno de esta crema es que es muy ligera. No lleva ningún tipo de lácteos ni de espesantes. Además, se hace en un momento con unos ingredientes muy simples. Por darle un toque especial, doré primero unos champiñones, pero no hace falta hacerlo. Es solo para adornar el plato.


Yo le puse caldo de pollo, pero se puede hacer perfectamente con caldo vegetal y convertirla, así, en una receta vegana.

Os dejo ya con la receta. A ver si cojo el ritmo poco a poco.



Ingredientes:
600 g de champiñones
4 o 5 dientes de ajo
Una cucharada de aceite de oliva
Una cucharada de pimentón dulce
Una pizquita de pimentón picante
Una cucharada de orégano
1 litro de caldo de pollo (o de verduras)





Lavamos los champiñones. Pelamos los dientes de ajo y los partimos al medio, quitando la parte interior. Partimos los champiñones en láminas gruesas, excepto 2 o 3 que los partimos en láminas finas.










Ponemos una cazuela al fuego con la cucharada de aceite. Doramos los dientes de ajo y reservamos. Doramos las láminas finas de champiñón y reservamos.
















Echamos el resto de los champiñones en la cazuela. Hacemos a fuego medio hasta que se ablandan y sueltan líquido. Sazonamos con el pimentón y el orégano. Mezclamos.












Dejamos que se evapore casi todo el líquido que han soltado y echamos la mitad del caldo de pollo. Dejamos que hierva unos 5 minutos. Apagamos y trituramos con una batidora de mano.








Ponemos el otro medio litro de caldo y colocamos al fuego hasta que vuelve a hervir.






Servimos en cuencos adornada con los champiñones y los ajos dorados.







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